Hablamos con José María López (Ganadería El Uno) “Mis bueyes están para dar seguridad a la empresa, toreros y corredores”. (Entrevista)

     Entre Estremera y Guadalajara José María López cría sus reses bravas con el hierro que lleva su nombre y también la Ganadería del 1. Este último hierro cría a los cabestros que se están haciendo célebres por cumplir casi militarmente con su trabajo en los encierros de Pamplona. Con el ganadero hablamos de la polémica generada por hacer bien su trabajo y de su labor con los bueyes que comenzó hace más de 20 años y que como él dice, ahora disfruta en la “Champions del toreo”.



Empecé como ganadero con mi padre que fue primero novillero y luego empresario. Compró una finca y organizamos festejos. Con los cabestros comenzamos para el manejo en las fincas con unas vacas berrendas. Florito me llamó la atención, es un maestro.
¿Es complicado crear una parada de mansos?
Bastante. Ten en cuenta que los bravos son seleccionados para que embistan pero los cabestros se seleccionan para lo contrario. Son animales a los que no puedes tentar y dependes de lo que veas en su manejo.
¿Cómo selecciona usted?
Por su morfología y por su capa. A mí me gustan capirotes y que tengan en la cabeza alguna marca como ser luceros, estrellados… Se seleccionan morfología y capa, luego se ve su comportamiento.
¿Con qué edad?
Desde becerros, nada más ser destetados.
Hablemos del comportamiento, ¿qué rasgos ve en ellos que le hacen decantarse para ser seleccionados?
Se les amarra y allí vamos viendo su carácter, si son tranquilos o nerviosos. Los vamos domesticando y observamos quién se va quedando adelante y quién atrás, quién coge la iniciativa. Los que van primeros no sirven para el campo porque tienen muchos pies y temperamento, características que no sirven para el encierro campero, sí para el de ciudad.
¿Por qué?
En el campo deben ser animales tranquilos mientras que en la ciudad son toros que van más deprisa y se requiere mayor velocidad y carácter.
Usted también tiene una ganadería brava, ¿cuál es más complicada de manejar?
Aunque sean procesos distintos debo decir que las dos son difíciles.
Para conocer un poco más a su hierro, ¿en qué pueblos actúan sus animales?
Sobre todo estamos en pueblos de Madrid y en encierros por el campo en Guadalajara. Son más de 200 festejos por Arganda (la cuna del recorte), Fuenlabrada, Villarejo de Salvanés, Estremera, El Álamo, Villaseca, Azpeitia, Roquetas…
Como usted me decía ahora está en la Champions del toreo, ¿cómo llega allí?
Un poco de manera accidental, bueno, accidentalmente no hay nada. Conocía a Zuñiga que era veedor de Chopera y ellos traían los bueyes. Quizás los descuidaron un poco y se hicieron mayores. El año pasado se dieron cuenta que hacían falta animales distintos y Zuñiga sabía lo que yo tenía y me llamó.
¿Cuántos animales tiene usted en la capital navarra?
20. Corren 6 con los toros, 4 de punta y 2 de tropa. Hacen el encierrillo, duermen en los corrales y son los que corren por la mañana. Detrás van 4 de escoba. El resto de mis animales están en el apartado, otros en el Gas y en la plaza por si devuelven algún toro.
Me decía las características ideales para la carrera en la calle, para el campo, ¿qué cualidades debe tener un buey para la plaza?
Ser valiente, obediente y que rompa la puerta cuando le nombre el mayoral. Hay bueyes cobardes que no rompen la puerta y se quedan con el toro porque saben que con él nadie les molesta.
¿Está usted con ellos?
Llevo dos días en Pamplona pero hay un encargado siempre con los animales.
¿Cuál es su cabestro estrella?
Ronaldo, de pequeño le llamaba Preciso porque siempre está, entra cuando debe y es el animal más obediente.
Hablemos de la polémica que se ha generado con sus animales en el encierro por, literal, hacer bien su trabajo.
Tiene que haber de todo. Entiendo que se quejarían igual si corren poco como lo hacen porque corren mucho. Mis animales hacen bien su trabajo protegiendo a los toros y a los corredores.
Hemos llegado a escuchar que se pierde la esencia del encierro.
Eso no es cierto. En cualquier momento un animal se puede quedar solo, ponerse por delante de los bueyes o coger a alguien. Los toros también tiene su parte en la velocidad del encierro porque están muy preparados. Ahora todo se cuida más que antes (el antideslizante) y hay que ser claros, los contratiempos nunca son buenos y ahora se nos echarían aún más encima. Eso no es bueno para nadie.
Esta última parte me parece clave, ¿le parece que se está buscando el morbo?
La inocencia es muy atrevida. No entiendo tampoco a los que quieren coger a los animales de los pitones y hacerse fotos.
Usted está para evitar cualquier tipo de accidente.
Nosotros debemos dar seguridad a la empresa que son los que me contratan, a los corredores y a los toreros. Si un toro se lastima en el encierro y por la tarde hay que cambiarlo, es algo malo. Un comportamiento distinto por el encierro es malo para los toreros también. 
Me hablaba del entrenamiento de los toros, a sus bueyes los están tachando de atletas, ¿qué entrenamiento tienen?
No los corro pero los paseo 2-3 veces por semana unos 4-5 kilómetros. Si los corriese haría que se asustaran y eso no es bueno.
Lo que a mí siempre me ha llamado la atención es cómo los animales no se asustan durante la carrera delante de tanta gente.
Sí que se asustan, por eso se aprietan. Se ven acobardados y lo que buscan es llegar lo más pronto posible a los corrales para perder de vista a la gente. Ellos tienen en su cabeza su trabajo desde pequeños y no se les olvidan, siempre hacen lo que saben.
¿Qué le dicen los profesionales sobre su trabajo?
Me dan la enhorabuena. Esta mañana me ha llamado Florito, un maestro, y me ha dado la enhorabuena. Me ha dicho que vuelva o no vuelva que me quede con el buen trabajo y con lo que estoy viviendo.
¿Volverá?
No tenemos un contrato, estamos aquí de palabra.
Pero si todos están a gusto…
Creo que no habrá problema para seguir.
Su trabajo en Pamplona, ¿ha hecho que le llame más gente?
Sí, te van conociendo y al final, todos quieren lo mejor para sus fiestas. Todos quieren que salgan las cosas bien.
!Y aún así le critican!
Muchas veces las críticas vienen de la competencia y de corredores con los que no te llevas bien. He sido torero, ganadero y empresario y la relación no siempre es fácil. Siendo empresa me han jodido un toro algunos corredores en el encierro y, lógicamente, me ha cabreado. Eso te genera enemigos pero que cada cual diga lo que quiera.
Todos a gusto.
Creo que sí, no habrá problema.
Nos vemos en Villaseca y enhorabuena.
Allí tampoco tengo contrato con Jesús (risas) pero la palabra es la palabra. Llevamos ya cinco años y siempre me han comentado que están muy contentos.

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