JUAN JOSE PADILLA (Entrevista)

"Mi mayor éxito es que me recuerden con respeto"

 

Juan José Padilla culmina su carrera este domingo, 16 de diciembre, en la Plaza México y lo hará a lo grande, como grande está siendo su último año en activo. De principio a fin. No le ha vuelto la cara a ninguna plaza ni a ningún compromiso. De lo contrario no hubiese sido Padilla.

 

 'Mi mayor éxito es que me recuerden con respeto' 

     -El año 2018 quedará marcado en el corazón y en la memoria del Padilla torero y, sobre todo, imagino, del Padilla hombre…

     -Para siempre. Me he sorprendido muchísimo de tanto cariño y tantos honores que he recibido en todas las plazas. Desde Castellón pasando por Valencia, la ovación de Madrid después de hacer el paseíllo, Bilbao, con ese baile típico de la región; Santander, Pamplona con su “Padilla quédate, Padilla, quédate…” y después he tenido la suerte de que los toros me han ayudado, hay que reconocer que en la mayoría de las corridas me han ayudado y he podido dejar sensaciones muy buenas. Si no parecía que me iba a despedir sino que tenía la ambición del que llega. 

     -Además ha sido positivo en cuanto a la cantidad y el nivel de los compromisos asumidos.

     -Sí, ha sido un año de mucha responsabilidad con las máximas figuras del toreo y con las mejores ganaderías. Es lo que se merecía una trayectoria como la mía. Poder compartir esta temporada en España, Francia, Portugal y ahora América es un orgullo.

     -Que las cosas hayan salido tan bien y que la gente se haya volcado tanto, ¿no ha hecho que se replantee la decisión de la retirada?

     -Cuando decidí tomar esta decisión es por convicción y te cambia el chip, te planteas la vida ya de otra manera. Quieres culminar tu etapa. Me voy en un gran momento personal y profesional. Tampoco hay mejor número de temporada como la que hace 25 y sobre todo haber conseguido tantísimas cosas como he conseguido sobre todo después del percance de Zaragoza. No quiero abusar ni exigirle tanto a Dios. Sería egoísta.

  

     -Hablamos de un año bonito, lleno de reconocimientos… pero también ha sido un año duro, con percances serios.

     -Esta profesión es una profesión de riesgo, exigente, muy celosa y para estar en este circuito importante hay que arriesgar y apostar. De esa manera es más fácil que los toros tropiecen y se paguen esos tributos. Pero yo me vestía de torero siempre defendiendo el honor que procedía y mi territorio. Lo importante es que me he recuperado rápido intentando que no se notara. Lo que no quería era demostrar ningún tipo de victimismo.

     -Estas últimas semanas ha estado en América donde ha asumido los últimos festejos de su carrera. ¿Cómo lo está viviendo?

     -Me alegro de haber tomado la decisión de hacer despedida en Lima y México porque son plazas que he frecuentado durante muchos años y tengo lazos de amistad muy profundos. Me despedí de Aguascalientes, Monterrey, Guadalajara… Lo estoy viviendo intensamente, me están homenajeando prácticamente en cada tarde las peñas, tocan Las Golondrinas en todas las plazas de despedida. Es increíble. 

     -La México, este domingo 16 de diciembre, pondrá el broche de oro a estos 25 años. ¿Por qué esa plaza?

     -Lo hemos decidido así porque es la plaza más importante de Latinoamérica en lo que a mi trayectoria supone pues indulté un toro y he salido cuatro veces a hombros. Hay una afición que me respeta y me quiere. La fecha ya está ahí pero, sabe, no lo veo ni con pena ni con vacío. Todo lo contrario, solo que cuando me quito el vestido de torear lo único que pienso es que no volveré a ese hotel vestido de luces, pero sé que la persona seguirá emocionándose con los compañeros.

     -¿Qué le ha aportado el toreo al Padilla hombre?

     -Muchísimo: valores, entendimiento, el propio toro te hace curtirte mentalmente… en definitiva es un modelo de vida. Tratas de mejorar en tu profesión y paralelamente también lo haces como ser humano. Te ayuda en esa lucha constante de superación. 

     -Y al revés… ¿cuál ha sido su aportación al toreo?

     -Sería feliz con que me recordaran con respeto. Con eso ya me sobra. Yo he respetado y respetaré toda la vida este oficio tan maravilloso y mi mayor logro, sobre todo en estos tiempos de tantas especulaciones, sería que me recordaran con respeto. A mi trayectoria y a mi filosofía de vida. He amado y amo profundamente mi profesión, la he sabido respetar y solo pido que se me recuerde con respeto.

     -Ya no le puedo preguntar por cómo se plantea la próxima temporada… así que ¿dónde podremos encontrarle si queremos saber de usted?

     -Estoy tan metido en mi despedida que no he pensado más allá… En el mismo teléfono me podréis localizar -ríe-, en mi casa con mis hijos y cercano al mundo del toro. Luego me podréis ver en un tendido, en una barrera o en algún callejón, en el campo y llenándome de esas cosas que me emocionan.

     -¿Podría ser ligado profesionalmente al toro?

     -Me han ofrecido oportunidades, pero ahora mismo, a día de hoy, no me he planteado absolutamente nada. No las descarto pero ahora mismo, y no te engaño, no he madurado nada ni me he planteado nada. Ahora solo tengo en mi mente dar las gracias de corazón a todo el mundo del toro por estos 25 años que han sido y serán inolvidables. Después, ya se verá…


     Un héroe de nuestro tiempo

     No le gusta lo más mínimo ponerse medalla alguna y menos por haber superado serios percances que como él mismo dice “van unidos a esta profesión y no tiene ningún mérito, es lo que hay que hacer”. Sin embargo Juan José Padilla no deja de ser un referente. Hombre de férreos valores y voluntad de hierro que lo han convertido en un héroe de nuestro tiempo. “Lo que no he hecho nunca es girar la cara, eso es verdad, y siempre he tenido claro que tenía que ser así. Quizás eso me haya hecho sobreponerme a situaciones tremendamente duras pero que con fortaleza y con la ayuda de Dios he salido de ellas”, admite Padilla. “Gracias a esas convicciones tengo unos niños con una fortaleza tremenda y con una forma de entender la filosofía de su padre que es admirable. No quiero darles sermones pero en mi casa esa filosofía de vida se lleva a cabo desde que nos levantamos hasta que nos acostamos y doy gracias por tener unos niños tan maravillosos y que tanto ellos como mi mujer, siempre, siempre, han estado a mi lado. Así que esta retirada también va por ellos”.

 

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