El mexicano corta un trofeo del segundo; la espada priva a Garrido de tocar pelo; y Javier Marín se estrella con el lote más complejo de una corrida de La Palmosilla que tuvo más movimiento que entrega.
El que abrió plaza fue un toro tremendamente serio. Garrido firmó un buen recibo de capote rematando con una media rodillas en tierra. Quite de Luis David por saltilleras. El de La Palmosilla marcó mucho las querencias en el segundo tercio y llegó a la muleta con movilidad y exigente repetición. José Garrido anduvo firme y esforzado en una faena solvente ante un toro encastado que embistió con más movilidad que franqueza y entrega. Mató de pinchazo y media. El toro fue ovacionado en el arrastre.
Garrido lanceó con suavidad a pies juntos al cuarto de la tarde. Anduvo variado capote. Llevó al caballo con el capote a la espalda. Quitó Luis David por chicuelinas. El de La Palmosilla embistió con repetición y con más clase y entrega que sus hermanos. Disposición y firmeza en la faena de José Garrido que no se dejó nada en el tintero. Intentó matar en la suerte de recibir cobrando un pinchazo que le permitió descabellar. El de La Palmosilla fue aplaudido en el arrastre.
Más lavado de carnes y algo montado fue el castaño segundo. De salida le costó centrarse en los capotes. Quitó por saltilleras de Javier Marín replicando Luis David por zapopinas. Banderilleó el propio Luis David firmando un tercio un tanto desigual en reunión y colocación. Inició su faena en los medios con dos pases cambiados por la espalda. El de La Palmosilla tuvo movilidad y repitió las embestidas aunque sin humillar y con falta de clase. El torero tiró de repertorio en una labor variada y de mucha entrega. Intentó la suerte de recibir cobrando una estocada finalmente al encuentro de gran efecto.
El quinto fue un toro grandón y vasto en sus hechuras. Quitó Luis David por navarras antes de que dejara dos buenos pares de Miguel Martín. Inició su faena por estatuarios ante un toro que resultó complicado y correoso. El de La Palmosilla tuvo una embestida carente de entrega e informal, obligando a Luis David a un esfuerzo extra para solventar con profesionalidad. Mató de pinchazo y estocada.
El tercero de la tarde fue devuelto a los corrales tras partirse la punta del pitón al rematar en un burladero. El sobrero, del hierro titular, fue un toro vasto de hechuras que hizo una buena pelea en el caballo montado por Santiago Morales “Chocolate” que brilló ejecutando dos buenos puyazos. Javier Marín anduvo voluntarioso ante un toro que resultó deslucido por su falta de clase solventando dignamente. Se atascó con los aceros.
El sexto fue un toro que abría la cara y presentaba una gran alzada. Se lució José Garrido con un garboso quite por chicuelinas. El toro, deslucido en informal, fue desarrollando sentido y acabó poniéndose muy peligroso. Javier Marín suplió la falta de oficio con una sincera entrega. Recibió una fuerte voltereta al intentar pasar al de La Palmosilla por el pitón izquierdo, por fortuna sin mayor consecuencia. Con los aceros pasó un auténtico quinario.
Pamplona. Sábado 13 de julio de 2019. Feria de San Fermín. Toros de La Palmosilla (3º bis), desiguales de presentación y juego. Destacaron el encastado 1º y el enclasado 4º. José Garrido, silencio tras aviso y ovación; Luis David, oreja y silencio; Javier Marín, silencio tras aviso y silencio tras aviso. Entrada: Lleno.
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